Me encanta la idea de pensar que este blog está más vivo que muerto aunque no publique ninguna noticia en años. La realidad es que este lugar está ubicado en otra parte, no en la red, ni en internet, sino en un lugar más cercano y profundo, quizá en Marte y continúa siendo un hervidero de ideas no manifestadas o quizá esté dentro de mí o incluso de ti también.
Hace escasamente unos días un amigo me sugirió que debía volver a la raíz de todo, al sitio de donde todo surgió, a este espacio titulado «My Martian World» o lo que es lo mismo, «Mi Mundo Marciano». Necesitaba poder expresar mis sentimientos de algún modo, fundamentalmente a través de la música y por eso lo creé. Pues sí, tiene razón, porque parece mentira que después de pasar a organizar algunos conciertos, escribir a todo el mundo y en todas partes, no lo haya hecho aún aquí.
Lo que realmente quiero transmitir, volviendo a teclear de nuevo en este espacio, es, por un lado, que todo está interconectado de una manera extrañísima y constante y por otro, que el tiempo es lo más valioso que tenemos en la vida. Conocí la música de Electrelane, una vez más, a través de escuchar a mi querido Jeremy Jay y casualmente, otro amigo de mi barrio también escuchaba la banda muchísimo y desde entonces pasó a formar parte de mi música favorita «De la Vida» (como digo yo) y recurrente, para todo estado anímico. Su música es tan amplía que abarca prácticamente todas las emociones y te ayuda en todas las situaciones. Es una píldora musical de una creatividad apabullante.
Cuando comencé a hacer mis «Vuelos a Marte», playlists o listas de canciones para transmitir un mensaje o emoción, por aquel entonces Spotify no te hacía estas playlists que hace ahora de la nada mediante algoritmos, de música para cenar, bailar, ir de viaje etc. Entonces, un día se me ocurrió hacer una lista de canciones, de las canciones favoritas de mis artistas favoritos (rizando el rizo, jaja). Jeremy Jay me contestó, Samuel T. Herring de Future Islands, a quien le agregué de amigo (aún no era tan famoso) me dijo que le gustaría tocar en Bilbao porque no lo conocía y Verity Susman, de Electrelane, me dijo que su canción que le hacía «moverse» o que le tocaba la fibra sensible porque le recordaba a su infancia era «Dancing In The Dark» de Bruce Springsteen. Realmente fue la única que me contestó claramente y yo, como agradecimiento, le dije una canción que me hacía sentir muy feliz siempre que la escuchaba, «Amapola» («Pretty Little Poppy» de Helen Forrest, 1941), canción que me cantaba mi amama (abuela) en inglés desde pequeña y se la dediqué. No sé si ella se acordará de esta historia porque fue allá por el 2016, pero desde entonces comencé a seguir todos sus proyectos.
Tras la disolución de Electrelane, Verity volvió con dos temas que me volaron la cabeza: «Make You Afraid» cuyo video también te vuela la cabeza y que además sale un planeta y con el que al final me identifico completamente por el miedo de los hombres a las mujeres que buscamos otras cosas en la vida y luchamos por cumplir nuestros sueños ( por favor, atentos al registro vocal de ella en el punto álgido de la canción) y «The Philip Glass Ceiling» que ha desaparecido de las redes pero que os puedo asegurar que era apoteósica, como su nombre indica, tocar el techo de Philip Glass.
En fin, que os va a contar una ferviente admiradora de Electrelane y de Verity Susman, pero también de Wire, banda que habré pinchado un montón de veces.
Cuando ella publicó su nuevo proyecto con Matthew Simms, creo que fui de las primeras en escucharlo, MEMORIALS y como no, me encantó. Su primer single, «It’s In Our Hands» me volvió a tocar completamente con su letra y con el sentimiento de aquellas mujeres que se juntaron para luchar en contra del almacenamiento de armas en Greenham Common. Yo también me sentía así con la vida y con todo lo que nos está pasando actualmente en todos los sentidos en nuestro mundo, que parece que toda va a la deriva y camino hacia la extinción.
En marzo de este año, 2023, escribí tres bandas que me gustaría traer a España o cuyos conciertos me gustaría organizar, en una nota del móvil para tenerlo presente para mí misma y de repente, en julio, la banda vino a mí como por arte de magia o del poder del pensamiento, a saber. Me llegó un email con la posibilidad de organizar su concierto y entonces, os pregunto, ¿Qué haríais vosotros ante una situación asÍ?
En mi caso, lógicamente o no, hacerlo. Incluso cuando no estaba segura, ya había reservado el hotel, creado una lista de canciones para el concierto y visualizado claramente a MEMORIALS en el Café Berlín de Madrid. A medida que he ido escuchando su doble álbum debut, más me he convencido de que tenía que ser así. Ambos me encantan.
Hoy es el gran día de cumplir un sueño hecho realidad. Me he decidido a hacerlo porque me gustaría que la gente conociera lo que la música es capaz de hacer. Cuando escuché la última canción de «Women Against The Bomb» pensé, lo tengo que hacer sí o sí. Tengo que luchar y dar a conocer esto, ambos discos. Y eso es lo importante en la vida, luchar por tus sueños, aportar algo, si es posible, a los demás; la vida es tan efímera que no te das cuenta pero pasa a toda velocidad y dura mucho menos de lo que pensamos. Cuando Javi Homeboy «estaba aquí», yo compartía mucho de su humor, a veces le enviaba memes de Radiohead que encontraba por ahí porque sabía que era fanático de la banda y eso que apenas le conocía y cuando David Kano puso en las redes que le había enviado una cosa y que él le dijo que se lo quería pagar porque sabía que se iba a morir y según cuenta David Kano, él le dijo, que «para qué iba a tener el dinero en el banco cuando él ya no estuviera, que prefería que lo tuviera él», pensé: A la mierda, lo voy a hacer. Y ni remota idea tenía de que Javi Homeboy era amigo desde la adolescencia de mi amigo Rafa, que fue quien me incitó a organizar conciertos, ni tampoco de David Kano con el que un día hablé para compartir piso. ¿Y qué me decís si os cuento que los italianos New Candys cuyo concierto organicé por estas fechas el año pasado en Madrid, tocaron el sábado en Brighton y que ese mismo sábado, Memorials, de Brighton, tocaron en Italia por primera vez? (¿Pero esto qué es? ¿Un fallo de Matrix?)
Hoy 3 de octubre, los que podáis o queráis, os veré en el Café Berlín de Madrid para bailar en la oscuridad al ritmo de MEMORIALS, de Verity y de Matthew y de todos los que están y de los que no están.
My Martian World 